El avance tecnológico ha abierto nuevas oportunidades para mejorar la calidad de vida, la seguridad y la autonomía, especialmente para las personas frágiles o con necesidad de apoyo. Desde la prevención de enfermedades hasta la seguridad en el hogar, la tecnología ofrece soluciones prácticas para el bienestar diario.
- Telemedicina: acceso rápido a la atención médica
La telemedicina permite recibir atención sanitaria sin necesidad de desplazarse, algo especialmente útil para quienes tienen movilidad reducida o viven en zonas con acceso limitado a especialistas.
Por ejemplo, personas con enfermedades crónicas, como la diabetes o la hipertensión, pueden compartir registros digitales con su médico para ajustar su tratamiento sin acudir a consulta. También existen servicios de fisioterapia y rehabilitación en línea, donde los pacientes siguen ejercicios guiados desde casa.
Además, el apoyo psicológico a distancia ha cobrado importancia, ofreciendo terapias accesibles para gestionar la ansiedad o el estrés sin largas esperas.
- Dispositivos de monitorización de la salud
Los dispositivos inteligentes permiten un control preciso de la salud mediante sensores que miden la frecuencia cardíaca, los niveles de oxígeno en sangre o la actividad física.
Un ejemplo clave es la detección de arritmias a través de relojes inteligentes, que pueden alertar al usuario o a sus familiares ante un ritmo cardíaco irregular. También hay sensores de caídas que activan una alerta automática en caso de accidente. Algunos monitores portátiles y pulseras biométricas permiten controlar la calidad del sueño y otros indicadores clave.
Para las personas con diabetes, los medidores de glucosa sin pinchazos frecuentes facilitan un seguimiento más cómodo y preciso, enviando los datos al teléfono móvil o al médico.
- Dispositivos inteligentes para el hogar y la movilidad
La tecnología aplicada al hogar mejora la seguridad y la comodidad diaria. Muchos conocen ya los dispositivos de teleasistencia que pueden alertar a familiares o servicios de emergencia en caso de peligro. Sensores de movimiento activan luces automáticamente para evitar tropiezos, mientras que cerraduras inteligentes permiten abrir la puerta sin llaves, facilitando el acceso a familiares o cuidadores. También existen asistentes de voz que ayudan a recordar citas médicas o gestionar llamadas.
Fuera del hogar, los relojes con GPS ayudan a personas con dificultades de orientación, permitiendo a sus seres queridos conocer su ubicación en tiempo real.
- Aplicaciones móviles de salud y bienestar
Las aplicaciones móviles facilitan la gestión de la salud, desde recordatorios de medicación hasta programas de ejercicio adaptado. Algunas guían en la realización de ejercicios físicos adecuados para cada condición de salud. Otras ayudan en el bienestar mental con técnicas de relajación, respiración y ejercicios cognitivos.
Para mejorar la alimentación, existen apps que registran la dieta diaria, sugieren menús equilibrados y alertan sobre deficiencias nutricionales.
Muchas aplicaciones permiten mantenerse conectado con familiares y amigos, otras ofrecen contenido educativo y cultural. Incluso hay plataformas de educación continua con cursos para mantenerse activo.
- Prevención y diagnóstico temprano
La inteligencia artificial está revolucionando la detección precoz de enfermedades mediante el análisis de datos médicos con una precisión sin precedentes.
Por ejemplo, algoritmos avanzados pueden detectar patrones en radiografías o análisis de sangre, identificando signos tempranos de cáncer o Alzheimer antes de que los síntomas sean evidentes.
En casa, algunos sensores monitorean cambios en los patrones de movimiento o comportamiento, alertando sobre posibles señales de deterioro cognitivo. También existen dispositivos que analizan la respiración nocturna para detectar apnea del sueño, una condición que puede tener consecuencias graves para la salud.
- Superando la brecha digital
Para aprovechar al máximo estas innovaciones, es fundamental que sean accesibles para todos. Talleres de alfabetización digital y programas de formación en el uso de aplicaciones móviles están ayudando a reducir la brecha digital. Cada vez más ayuntamientos y asociaciones ofrecen cursos gratuitos para aprender a utilizar videollamadas, gestionar citas médicas en línea o configurar dispositivos inteligentes en el hogar.
La tecnología está transformando el bienestar de las personas mayores y/o frágiles, ofreciendo herramientas que favorecen la autonomía, la seguridad y la prevención de enfermedades. Estos avances les facilitan la vida diaria y brindan tranquilidad a ellos y a sus familiares.
Fotos de Freepik y Bence BOROS en Unsplash
20/02/2025
